Zonas de bajas emisiones en Torremolinos
Torremolinos comienza el proceso de participación ciudadana para la creación de zonas de bajas emisiones del municipio
Las ciudades de más de 50.000 habitantes como es Torremolinos, y además en cumplimiento de las distintas normativas europeas, tenemos que implantar en los centros históricos zonas de bajas emisiones. Esto lo que persigue es hacer centros históricos más habitables en los que el coche no sea el principal protagonista, que haya aparcamientos disuasorios y el fomento del transporte público. La única forma de conseguirlo es hacerlo junto a los colectivos de la ciudad, trabajar de forma conjunta y crear un diseño en el que todos nos sintamos de acuerdo y en el que todos participemos. Ese trabajo ya ha comenzado por parte del Ayuntamiento de Torremolinos para que nuestro centro sea cada vez más habitable, que esté libre de ruidos y en el que podamos vivir mucho mejor” ha explicado la alcaldesa, Margarita del Cid.
Así, ha tenido lugar ya la mesa de constitución de la Comisión de Seguimiento del Plan de Sensibilización, Comunicación y Participación para la implantación y modelización de la zona de bajas emisiones en el municipio, que tiene como fin la coordinación de la necesidad de las actuaciones que se van a realizar en distintos ámbitos.
Tráfico
Desde la Delegación de Tráfico, en colaboración con la Delegación de Participación Ciudadana, se convocó a la misma a los agentes implicados, entre ellos, la concejala de Tráfico, Gloria Manoja, el concejal de Medio Ambiente y Seguridad, Francisco Cerdán, el de Participación Ciudadana, José Manuel Ruiz y la concejala de Accesibilidad, Avelina González, además de técnicos municipales de diferentes áreas, Policía Local, consultores de empresas especializadas y asociaciones de empresarios y comerciantes, entre otros.
La creación de una zona de baja emisión requiere una serie de actuaciones de calado, de mejor gestión del tráfico y de creación de infraestructuras paralelas para que sea más fácil moverse por el centro sin tener que recurrir al vehículo privado. Crear una zona de estas características supone además prohibir el acceso a las zonas céntricas de la ciudad de aquellos vehículos que sean más contaminantes.
Cuatro fases
El proceso participativo abarca cuatro fases: planificación, diseño operativo, puesta en marcha y seguimiento.
En esta primera reunión de la comisión de participación ciudadana hubo una primera aportación de ideas tras la que se va a continuar trabajando para que la zona de bajas emisiones sea una realidad lo antes posible y que Torremolinos sea cada vez una ciudad más amigable, más verde, más respetuosa con el medio ambiente.
A su vez, se ha habilitado un link para que los ciudadanos puedan manifestar sus ideas o aportaciones por medio de una encuesta: https://encuesta.com/s/iIyKTk3eEEXqt8-4JOdhuw/
Estas actuaciones se enmarcan dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia, que financia la Unión Europea mediante los fondos Next Generation.