Reutilizar pelotas de tenis
Ecomarb y el Club de Tenis Puente Romano investigan cómo reutilizar el caucho de las pelotas de tenis en la impresión 3D para crear nuevos productos
El plástico inunda nuestras vidas y lo encontramos cada día en la mayoría de los productos que utilizamos. En la actualidad se ha convertido en un auténtico problema medioambiental; ya que una bolsa común tarda en degradarse 150 años y una botella PET hasta 1.000. La mayoría de los objetos que desechamos tras un solo uso permanecerán sobre la Tierra más que cualquiera de los humanos que ahora la habitan. Ecomarb y el Club de Tenis Puente Romano se unen en la investigación para reutilizar el caucho de las pelotas de tenis.
Esteban Ferrón es un empresario turístico dedicado al segmento de alto standing que uniendo su experiencia profesional y su conciencia medioambiental ha llegado a la conclusión de que “la sostenibilidad es el nuevo lujo”. Los turistas van a elegir destinos respetuosos con el medioambiente, asegura. De ahí que considere indispensable un cambio de rumbo para Marbella porque de otro modo puede morir de éxito. Para poner su granito de arena ha fundado Ecomarb; una plataforma de la que participan distintos profesionales, empresas y voluntarios que tiene en marcha varios proyectos de reciclaje y economía circular.
La propuesta, tal y como explica Ferrón, incluye investigación, concienciar y buscar soluciones a problemas. Un proyecto precioso en el que estamos trabajando es con Club de Tenis de Puente Romano, para reciclar las pelotas de tenis. Se consumen una barbaridad y no se reciclan, subraya. «Estamos haciendo un trabajo de investigación para conseguir convertir el caucho en filamentos y crear un producto que se pueda utilizar en la impresión 3D para crear trofeos de tenis, por ejemplo», describe.
Mares Circulares
Otra de las iniciativas es Mares Circulares. «Tenemos la colaboración de la Cofradía de pescadores de Marbella y la asociación Vertidos Cero; además del apoyo de la fundación Coca-Cola», manifiesta. Los arrastreros de la flota marbellí y los barcos de pesca tradicional recuperan el plástico de los fondos marinos y lo llevan a un contenedor para poder reciclarlo, explica Ferrón. Uno de los usos que se le puede dar a ese plástico recuperado es la fabricación de mobiliario urbano, propone el fundador de Ecomarb. De ahí que otro de los proyectos sea la creación de un banco que se donará al Ayuntamiento para que se coloque en algún lugar público del término municipal, como algo simbólico para que se convierta en un icono de la ciudad.
Una tabla de surf para la subcampeona del mundo de este deporte adaptado, la joven marbellí Sarah Almagro; así como el reciclaje del ciento de pelotas de golf que se pierden cada año son otras de las acciones que está llevando a cabo la plataforma.
Fuente: Diario Sur