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Un cazador salva a dos cernícalos

Un cazador salva la vida a dos cernícalos heridos en Fuengirola

Francisco Sedeño, un cazador natural de la localidad malagueña de Mijas, ha salvado la vida de dos cernícalos a los que ha alimentado y cuidado hasta que pudo entregarlos a los Agentes de Medio Ambiente para su traslado al Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) donde ya se recuperan de sus heridas, según ha informado la Federación Andaluza de Caza (FAC).

Fue el pasado domingo cuando este cetrero malagueño recibió la llamada de la Policía Local de Fuengirola, que tras recuperar a dos cernícalos heridos y desorientados solicitaban su ayuda como cetrero para alimentar y mantener a estas dos aves hasta su entrega al CREA.

En declaraciones a la FAC, Sedeño explica que se encontraba de escalada cuando recibió la llamada de la Policía de Fuengirola.

«Como cetrero no dudé en acudir a la Comisaría de Fuengirola para recoger estas dos rapaces protegidas. Los cernícalos no habían comido nada, se encontraban desorientados y deshidratados; por lo que lo primero que hice tras llegar a casa fue alimentarlos y darles de beber».

Este tipo de actuaciones, que son bastante habituales entre los cetreros andaluces, destacan la labor de un colectivo que es fundamental para la custodia y conservación de las aves rapaces y de la biodiversidad.

«La Cetrería es mucho más que una modalidad de caza y se demuestra en actuaciones como ésta», señala José María Mancheño, presidente de la FAC.

Regresión de la especie

EI cernícalo, según el estudio científico de Juan José Negro Balmaseda, es probablemente el ave de presa que sufre una regresión más importante en España desde Ia promulgación del Real Decreto que en 1973 declaraba protegidas a todas las rapaces ibéricas.

La tendencia regresiva es general en toda su área de distribución Europea y sus causas no se conocen con precisión.

«Resulta sorprendente, además, la escasez de información sobre aspectos básicos de la biología de la especie; especialmente considerando su carácter gregario y accesibilidad (nidifica habitualmente en núcleos urbanos)», explica el autor; de ahí que imágenes como ésta del ave anidando en balcones y ventanas ya se hayan repetido en otras ocasiones.

Fuente: Jara y Sedal